UN CONSEJO A LA FAMILIA CON LA PASTORA LILIANA SPETRILLI: ESTABLECIENDO PRIORIDADES

UN CONSEJO A LA FAMILIA CON LA PASTORA LILIANA SPETRILLI: ESTABLECIENDO PRIORIDADES



ESTABLECIENDO PRIORIDADES

Ya están establecidos en su nuevo hogar, ahora comienza la gran aventura de la felicidad eterna “hasta que la muerte nos separe”. Dios amado, yo clamo a ti por la familia, que tu amor y tu justicia divina nunca se aparten de sus integrantes.

 En el Antiguo Testamento se acostumbraba a juntar dos bueyes de similar tamaño y peso para arar la tierra, de esta forma hacían surcos parejos para que las semillas cayeran en la misma profundidad y fructificaran perfectamente. De allí viene  el versículo que está en 2 Corintios 6:14 “no os unáis en yugo desigual”- De este tema hablaremos en capítulo aparte. 

Esos animales llevaban puestas en sus cabezas dos aros que estaban soldados y así iban siempre para el mismo lado tirando juntos hacia adelante sin separarse nunca. La pareja necesita esas coyundas, que así se llaman los aros, pero no de hierro sino de amor muy grande y de mucha comprensión. Supónganse que los animales tiraran cada uno para un lado distinto, jamás podrían sembrar nada ni avanzarían para ninguna parte.

Como siempre la Palabra de Dios es viva y eficaz. En Efesios leemos los deberes de las mujeres y de los hombres. A muchas damas no les agrada la palabra “sujetas”, pero esto  sucede porque muchos hombres se abusan de esto y se convierten en dictadores que no respetan a sus esposas como dice el contexto de estos versículos. Si bien la mujer debe estar sujeta, se compara al marido nada menos que al Señor Jesucristo como la Cabeza de la Iglesia, y que también llegado el caso, debería morir por ella para defenderla. Si el hombre ama a su mujer como Cristo ama a la Iglesia, de ninguna manera se puede convertir en un machista que no la respete. Lo mismo la mujer no se puede convertir en una “sargentona” que haga lo que quiera sin consultar a su marido y lo maltrate.

Como ven lo que el Espíritu Santo dice es lo justo y lo que es necesario que suceda para que las parejas lleven una vida fructífera, feliz con el amor del Señor y practicando el respeto mutuo. Dios los bendiga.

EFESIOS 5:21 “SOMETEOS UNOS A OTROS EN EL AMOR DE DIOS.”

Past. Liliana Spetrilli


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